En Canarias tenemos fuentes etnohistóricas datadas entre los siglos XIV y XVIII. Crónicas, noticias, relaciones, cronicones, memorias, historias y relatos, que aportan visiones del mundo indígena y son valoradas para contrastar la información arqueológica. Textos redactados por gente con concepciones mentales y conductuales del entorno bajo medieval, renacentista y barroco europeos, que exponen sus consideraciones sobre el comportamiento y las creencias nativas.
Los etnohistoriadores promueven la reinterpretación documental mediante su depuración analítica logrando que la arqueología y otras disciplinas puedan desmitificar narraciones y disipar errores, pues el valor de las fuentes escritas es mayor cuanto más se acerque a la veracidad objetiva que proporciona información útil a los intereses arqueológicos y antropológicos.
Las fuentes etnohistóricas de Canarias comprenden una amplia gama que clasificamos con criterios cronológicos y nominales de la siguiente forma:
1) Los primeros relatos del siglo XIV, como el del piloto genovés Niccoloso da Recco, la documentación de los viajes catalano-mallorquines y las referencias papales.
2) Las fuentes escritas de la primera mitad del siglo XV como Le Canarien, la crónica de la conquista normanda.
3) Las relaciones portuguesas e italianas de mediados del siglo XV y del XVI, como Gomes Eanes da Zurara, Diogo Gomes de Cintra, Aluise da Ca Da Mosto, Valentim Fernandes, Joao de Barros y Gaspar de Frutuoso.
4) Las llamadas “crónicas de la conquista”, entre las que destacan la Crónica de Juan II, Alonso de Palencia, Mosén Diego de Valera, Andrés Bernáldez, los textos Lacunense, Matritense y Ovetense, Antonio Cedeño y Pedro Gomes Scudero.
5) Las Relaciones Universales de Botero Benes y las primeras historias generales, desde fines del siglo XVI e inicios del XVII hasta el siglo XVIII, debidas a Leonardo Torriani, Fray Alonso de Espinosa, Fray Juan de Abreu Galindo, Francisco López de Ulloa, Tomás Arias Marín de Cubas, Fray José de Sosa, Juan Núñez de la Peña, así como las obras de Pedro Agustín del Castillo y José de Viera y Clavijo.
Además, podrán sumarse fragmentos de las obras de Francisco López de Gómara y Fray Bartolomé de Las Casas, así como manuscritos, actas notariales, protocolos, listados de esclavos, noticias directas e indirectas que ofrecen informaciones para complementar o acrecentar el fondo de materiales etnohistóricos. En este ámbito destacan la información de la Pesquisa de Esteban Pérez de Cabitos, los documentos del Registro General del Sello, los depositados en el Archivo General de Indias, el denominado Libro Rojo de Gran Canaria, las Datas de Tenerife, las Actas iniciales del Cabildo de Tenerife y el Juicio de Residencia del Adelantado Alonso Fernández de Lugo.
La bibliografía documental y los estudios historiográficos de todas estas fuentes son esenciales para conocer su autoría, los lugares donde fueron redactadas, la existencia de préstamos, copias y refundiciones, sus relaciones de prioridad y dependencia estilística, de fondo y contenido, su concreción cronológica, antecedentes, patrocinadores e influencias en otros autores.
Dr. José Juan Jiménez González, Conservador del Museo Arqueológico de Tenerife